LA SEMILLA

Sabía de las yerbas húmedas

desperezándose en las comarcas;

sabía del rechinar de tuercas

en el fondo de tumbas lúcidas.

Sabía del traquetear de hojas

fugando del jardín de los vientos,

sabía del piar de los cuentos

en la fronda de manzanas rojas.

Y va recorriendo laberintos

con ojos de luz en noche ciega

y al final de fecundante brega

brotará roturando instintos.

  

-11-

ABRAZO UNIVERSAL

La confusión, fiesta de arlequines,

hiere los sentidos a mansalva;

el alma de la ira no se salva

cuando la muerte suelta pasquines.

Con la grieta de  las estructuras

las casas hociquean en las calles,

y gritos topan en bocacalles   

y la muerte sonríe en fracturas.

El  mareo de risas y sonrisas

dañan ijares de sien dolida

que galopa por la faz molida

buscando  tapiz de  densas brisas.

El  paisaje, con pasta de nubes

y plaquetas de luz amarilla,

iluminará nuestra buhardilla

con la guiñada  de los querubes.

Nuestras tibias generacionales,

pues, clavándose y desclavándose

y nunca por nunca escondiéndose,

alimentarán nuestros quenuales.

-12-

MI SOLEDAD

Me disgusta cuando ríes,

parece que te burlaras;

se alejan tus mariposas

hiriendo mi soledad.

Pareces “muerta inmortal”

me disgusta cuando callas;

me congelan tus mejillas

enfriando mi soledad.

Me disgusta cuando  besas,

sellas con místico afán;

tu trote es de brioso alazán

matando mi soledad.

Me disgusta cuando lloras,

y te vas royendo senderos;

tu compás es de luceros,

refrescando  soledad.

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CARACOL

“Inka waqankancho”(*)

balcón  codiciado,

tu  beso perdiste,

y un rizo me diste.

Hada de los bosques!

con caracol tengo

del mar  sinfonía,

del Sol energía.

Con caracol tengo

de niñez los sueños,

de vejez los cantos,

de ti los encantos.

(*) Lugar donde el Inca lloró.

                            PEREGRINAJE

En nuestro peregrinaje universal,

partícula pensativa inmortal somos

que  por el frío vendaval  impulsados

nos acercamos a la fosa letal.

Sin embargo, en nuestro trato permanente,

sabemos que el ósculo no es un contrato,

que la vida es dichosa con un buen trato

y la muerte amiga muda y persistente.

El caminante es polvo pensativo

que atraviesa por los  puentes desgastados

y conquista los senderos suspirados

fuente viva de cognición y motivo.

El frágil cristal de rocío escarchado

retiene en su celda al universo entero

y nuestro corazón preclaro y sincero

alberga en su lecho algún beso  salado.

Las normas restan el acto de crear,

la imitación genera  mediocridad;

y si los hombres buscan su libertad

es porque tienen la voluntad de amar.

-15-

EL BRINDIS

Domingo de Guzmán Huamán Sánchez

A veces, con la pulsación herida,

y muchas, totalmente embriagado,

al contorno  de un tronco cepillado

filosofamos sobre la existencia.

- ¡ Salud por la muerte que es sempiterna!

- ¡No... por la vida que siempre agoniza!

- ¡Por ninguna que la pena eterniza!

- ¡Salud ... por esta tertulia fraterna!

A modo de arco iris, los tropezones

no tienen principio ni conclusión

y nuestro  brindis será la ilusión

que armonice los nobles corazones.

 ESPERANZAS

Los silencios  de la canción

no son los eslabones ¡Señor!

entre cantos del ruiseñor

haremos la revolución.

Con la desbordante emoción

batiremos al opresor,

y a nuestro falso defensor

le pediremos remoción.

Liberada nuestra Nación

ya no tendremos confesor;

convertidos en defensor

pediremos la rendición.

-17-

EL GORRIONCITO

En una jaula

de cristal y oro,

un gorrioncito

tan pequeñito

de pena cantaba

de pena lloraba.

De tanto cantar,

de tanto llorar

en melodía

se convirtió

y en pleno día

muy lejos partió.

  

SOL, LUNA Y VIENTO

El sol es un disco de oro

que decora los trigales

y fecunda los papales

aporcados con decoro.

Y la Luna luminosa

es luciérnaga de plata

que le despoja la bata

a la sombra tenebrosa.

El viento es soplo divino

que refresca los hogares

y juguetea con las nubes

que brindan rocío fino.

Cada uno tiene función:

el Sol dota de energías,

la luna cuida al viajero,

el viento campos purifica.

-19-

MIS  ARETES

Tengo dos aretes

de plata fina y oro,

y son mi tesoro

que yo  adoro.

Cuando yo me pongo

arete de plata,

mi prima Rogata

anda mojigata.

Cuando yo me pongo

arete dorado,

mi loro adorado

se vuelve alocado.