DOMINGO DE GUZMÁN HUAMÁN SÁNCHEZ
Nacido
en Cochapetí: “Resplandor de Halcones en Vuelo”, en 1938, toda su vida se
dedicó a la docencia y a la promoción cultural, dicen de él, tres
personalidades que conocen de su quehacer literario:
Domingo de Guzmán
El Dr. Roberto Rosario Vidal al exponer su
ponencia en el XVIII Encuentro de Escritores de
Ancash, realizado en Huari, en mayo 2009, con
participación de intelectuales invitados de los departamentos de Ucayali
y Huánuco y la presencia de uno de los
escritores más distinguidos de nuestro departamento Dr. Carlos Eduardo
Zavaleta, manifestó: ".Domingo Guzmán Huamán Sánchez,
reconocido por su labor como profesor de folklore, dramatización, títeres,
educación artística y expresiones grafico plásticas, incursionó en la
Literatura infantil con “Poesía infantil” (1994) y Teatro (1995). Ha obtenido
diversos galardones regionales, nacionales e internacionales por su labor
creadora: Carnaval / Ya llegó el carnaval/ bailemos todos contentos;/ ya
llegó el carnaval juguemos todos alegres. / Con serpentinas y talco/ wachiwallito,
wachiwalón, con concertina y flauta, / wachiwallito,”wachiwalón”.
El Dr. Jaime Loli Romero, agrega: “Huamán Sánchez,
así, a duros golpes de cincel, remando a veces contracorriente, invivito e indoblegable, vencedor del viento y la
nostalgia ha arribado a la estancia feliz
de la madurez poética, porque para llegar a la belleza de la imagen y la
grafía quien escribe debe transformarse en un verdadero Fidias de la palabra”.
Dr. Jesús Cabel, concluye: “Domingo de Guzmán es
conocido por su labor artística y expresiones gráfico plásticas. Ha
incursionado en la Literatura Infantil juvenil: “Poesía infantil” que reúne
poemas escritos por estudiantes de la Especialidad de Educación Inicial del IST
“Antonio Raimondi” de Huarás. Es
integrante del Grupo Literario “Qarwanchi” y de una ajustada muestra de poemas
de la Región, también ha realizado con
éxito Teatro Escolar.
Los editores
DOMINGO DE GUZMÁN
HUAMÁN SÁNCHEZ
MI
BAMBAMARCA
POEMA
Ediciones “Qarwanchi”
2013
SUMARIO
Dedicatoria
I
ESCENARIO
II
RETIREN
III
DEJEN EN PAZ
IV
PARVADA DE VIENTOS
V
NO QUEREMOS
VI
MINERA YANACOCHA
VII
MINERÍA ARTESANAL
VIII
COLORES QUE EMPOBRECEN
IX
BOSTEZOS ÁUREOS
X
NI MANOS FRANCAS
XI
XII
XIII
EL DETERIORO
XIV
EQUILIBRIO
XVI
CONTAMINACIÓN AMBIENTAL
XVII
FETIDEZ SEXUAL
XVIII
NUESTRO AMBIENTE
XIX
RECUERDOS
QUE DESHIDRATAN
XX
EL
CONTAMINANTE
XXI
PREVENCIÓN
XXII
EFECTOS
XXIII
SE AGOTA LA
VIDA
XXIV
FRENEMOS LA MODIFICACIÓN
XXV
FAROLAS DEL RECUERDO
XXVI
ES UNA RATONERRA
XXVII
COSQUILLA Y MATA.
XXVIII
SECUELAS
XXIX
OJOS DE MAIZAL
XXX
ASESINATO DEL OZONO
XXXI
XXXII
PROCESO URBANÍSTICO
XXXIII
DESEO TANTO
XXXIX
RESIDUOS
XXXV
HAY QUE DIBUJAR UNA
SONRISA
XXXVI
EL EQUILIBRIO
XXXVII
EL
DESARROLLO
XXXVIII
PROBLEMA
DE SALUD
XXXIX
XL
INCERTIDUMBRE
XLI
NO ERES MÍO, TAMPOCO SOY TUYO.
XLII
NO
CONTAMINEN
XLIII
NI MANOS FRANCAS
XLIV
BOSTEZOS
ÁUREOS
VLV
COLORES QUE EMPOBRECEN
XLVI
MINERÍA ARTESANAL
XLVII
MINERA
YANACOCHA
XLVIII
NO
QUEREMOS
XLIX
PARVADA DE VIENTOS
L
DEJEN
EN PAZ
LI
RETIREN
VOCABULARIO
QUECHUA
1.-
Chuklla Casa con paredes de
piedras y techo de paja
2.-
Mama killa Madre Luna
3.-
Micuypampa Llanura de alimentos
comestibles
4.-
Ñusta” Princesa de los incas.
5.-
Porqo Esófago
6.-
Porqon Su esófago
7.-
Killiksha Cernícalo
8.-
Qoqoroche Disfraz de demonio de
los andes.
9.-
Shukuki Torbellino de aire que
arrasa todo a su paso.
10.-
Supay Demonio
11.-
Tayta Inti Padre Sol
12.-
wawan Su hijo.
13.-
Wayanita Oscuras golondrinas.
14.-
Yanacocha Laguna negra.
DEDICATORIA
Bambamarca, presiento tu
presencia,
mientras mi Cóndor recrea tu
ausencia
posado en una escarcha abismal
del cielo,
mientras el manso dolor me
acompaña.
Engreída del Ande, cuello
erguido
con “anacu” bordado con clavelinas albas,
la sinuosa carretera bordeada
de poesía ,
permite, cruzando miradas,
llegar a tí.
Es complaciente y dolorosa tu
ausencia
que con los pinceles pigmentados
de pena
trazo bocetos de tu frágil y palúdica
imagen
en el lienzo grisáceo de mis
recuerdos.
Ni un suspiro fragmentado se diluye
en el ángulo oscuro del recuerdo punzante
de donde emergen los suspiros, cual danzantes,
haciendo cosquillas con
taconeos del recuerdo.
“Mi Bambamarca-Poemas”, versos
brotados
del “Manifiesto de Respeto
al Ambiente”,
dedico a los vates del universo
que captan,
a diario, al personaje reinante
de su época.
Se desvanecerán los amores
juveniles,
el ardor de fogatas en un
ángulo de la choza;
pero, se dimensionará como
ondas del mar
el Festival de Poesía ... "Luis Yañez Pacheco".
Domingo de Guzmán
I FESTIVAL DE POESÍA INTERNACIONAL
"ARNULFO VÁSQUEZ
VÁSQUEZ".
BAMBAMARCA - CAJAMARCA.
Del 2 al 5 de julio 2008.
La Casa del Poeta Peruano – Filial Huarás, expresa su gratitud al Lic.
César Mejía Lozano presidente de la Casa del Poeta Peruano de Bambamarca, a la
Municipalidad Provincial de Hualgayoq - Bambamarca en la persona de su Alcalde
Don Esteban Campos Benavides y a la Casa del Poeta Peruano, en la persona del
Presidente Nacional Dr. José Guillermo Vargas Rodríguez y a toda la población
de Bambamarca y poetas que asistieron a este evento singular: Hugo Noblecilla
(Tumbes) Horacio Hidrovo (Ecuador), Poeta de Cajamarca, Antonio Goicochea
(Cajamarca), Lily Cuadra (Chiclayo/Lima), Gregorio Díaz (Cajamarca), artista
plástico Rómulo Santana (Ecuador) y Luis Castillo (Cajamarca/Lima), Ana
Maizondo (Tumbes), Andrés Kuo (Lima/Tacna), Esteban Campos (Alcalde de
Bambamarca), Pedro Reyes (Barranca), Domingo de Guzmán Huamán Sánchez (Ancash),
Oscar Aguirre (Callao), decimista Antonio Silva (Chincha/Lima).
Transcurrido un lustro, mi gratitud a www.casadelpoeta.com por haber colgado en su blog, el presente poemario: “MI BAMBAMARCA – POEMAS”
de mi autoría y su difusión a la población escolar y padres de familia, fomentando la Biblioteca Escolar,
punto de partida para la liberación del espíritu y la conquista de la justicia
social con pan y libertad plena.
Domingo
de Guzmán Huamán Sánchez
Presidente de la Casa del Poeta Peruano
Filial - Huarás-Ancash
I
ESCENARIO
No necesito de estrofas ensangrentadas
para saber que es amable y fragante cantuta
ni siquiera de la calidez de los fríos besos;
me basta la mirada de sus piadosas estrellas
y su atalaya que saluda con brazos al viento.
Descubro
al escarbar sus antiguas raíces
la floresta histórica perfumando inquietudes,
las
pupilas del viejo cóndor mostrándome
los senderos de la lluvia en
octubre y mayo
que trasladan a la Jalca de céfiros afinados.
Como
el rosal que abre al sol sus corolas,
a
través del cristal delirante de la historia,
de
la floreciente Villa de San Carlos
y de
Chota trasformada en distrito.
Su
aguerrida sangre inca contuvo
la
avalancha de la chilena ambición;
escenario
fue de bélicas insurgencias
del montonero
Eleodoro Benel
y del
Comandante Gustavo Jiménez.
Al
final de las vertebras del siglo XVIII,
enceguece
el fulgor del oro y la plata
a Micuypampa,
Purgatorio y La Punta;
y al
medio día fulgurante del siglo XX
Hualgayoc
se convierte en capital política.
El nativo
al radiografiar las semillas que sembró
descubre
su pasado sumergido en la infamia
de la
transnacional Minera Gold Fields Cima S.A.
que
sangra con su guadaña de impunidad
convirtiendo
a la niñez en anemia caminante.
Bambamarca
es Cristo que agoniza lenta,
con
la espina dorsal de su rosal marchito
y la
yugular de sus ríos profundos seccionada;
agoniza deseando que su muerte lenta viva,
apurando sus pasos por alcanzar la justicia.
Domingo de Guzmán
Huamán Sánchez
LI
RETIREN
¡ Por el espíritu de los apus¡
¡ por la sangre de nuestras
raíces¡
¡ por la cruz de almas
errabundas!
en el mitin de voces imploramos:
¡No infecten nuestras fuentes¡
¡Esfúmense sicarios del desorden
para nunca cruzarnos
en el desvío!
No interrumpan nuestros caminos
con piedras homicidas
palanqueadas,
y alojadas en el destino del caminante.
Esfúmense y cuando
se hayan extinguido,
seguiré sufriendo por la derrota de mi fe,
porque la fe de nada sirve si hay corrupción;
seguiré sufriendo por la derrota de mi fe,
porque la fe de nada sirve si hay corrupción;
mejor es decir
adiós, que sufrir de angustia.
Mejor es decir ¡quédate! que morir a traición.
Esfúmense sicarios del orden desordenado,
aunque sea, para dar pase a los
“otorongos”
que les urge dialogar con los narcotraficantes,
padrino de los gobernantes y funcionarios
previo brindis con whisky y coca macerada.
Con ondas y machetes, chavetas
y fuerzas
queremos frenar el avance galopante
de bárbaros defensores de sanguijuelas
que desraízan y ventean nuestras
“chukllas”
que arrasan y adormecen nuestros
vientos.
III
DEJEN
EN PAZ
Nuestra sangre escarchada
hierve en el fogón de la cólera
golpeando cavidades del corazón
que está a punto de estallar
por transgresiones y
meretricio.
Señores, fetos del voto popular,
exigimos la presencia de peritos
para distribuir nuestras
semillas;
queremos la presencia de
maestros
para modelar nuestro granos.
¿Para qué piquetes en las carreteras?
¿Para qué piquetes en
Ciudad de Dios
y Santa Marta de los afligidos?
Sr. Ministro del Interior ventee
a efectivos
de Magdalena, San Juan y Choropampa.
Dejad en paz a raíces aferradas
a sus campiñas, ríos y extensas
playas
que en noches difuntas cuentan estrellas
sin poder apretar el oro con
sus uñas,
salvo metales que corroen entrañas.
Pido, en nombre de los hijos
del Ande
que tejen y destejen
desconsuelos
y que sufren el brillo de las
bayonetas:
agua pura para irrigar sus ilusiones
y semilla para poblar sus esperanzas.
IV
PARVADA DE VIENTOS
Sr. General de la DITERPOL ,
es hora de respirar sin oler
pólvora.
Sr. Gerente General de
Yanacocha,
es hora de reposar sin
grilletes.
Vivimos deseando que nuestra vida
apure sus latidos para alcanzar la meta,
vivimos deseando que nuestras aves
tengan ramajes para colgar sus nidos.
Los invasores con corbatas de dólar
que recorren nuestras plazas y
calles
para nuestros niños son
“qoqoroches”
que izan estandartes con calaveras.
Los mineros con cuatro por cuatro
son “shukukís” que devastan aldeas
estirando tendones de la inocencia;
y tapiando los oídos de la conciencia.
Mi pueblo es parvada de vientos
que rotura auroras de luz vivificante,
desde el alba poblado por los ángelus
que dejan volar libre a las “wayanitas”.
Dejen en paz a los niños íntegros,
que rastrean los caminos
amarillos
llevando en sus morrales de
zagal
aguas benditas de pupilas
maternas.
V
NO
QUEREMOS
Porque
somos perfectos amando,
no
queremos que nuestras hijas
y
nuestras mujeres padezcan;
no
queremos que nuestras reses
y aves de corral desaparezcan.
Desde las faldas
del Huascarán,
casi al final de
mi loca carrera,
pienso que el
destino nos dejó
llevándose el olor
de la floresta,
y quitándonos el
sabor de la tuna.
El bando de las
estrellas nos dice:
El
pueblo es serpiente que duerme
y
se desenrosca para destilar veneno
en
el talón de los que cortan cañas
en
el talón de los que usurpan bienes.
Trasladen a los piquetes del orden
a donde las uñas hurgan basurales;
a donde la fechoría apuñala con ira,
a donde las alondras por hambre
entregan SIDA envuelta en
placeres.
¡Entiendo! ... El destino tiende la mano:
Magdalena
no quiere que fracturen
la
espina dorsal de las normas legales,
tampoco
desea carnaval de perdigones,
con
máscaras de incomprensión humana.
VI
MINERA
YANACOCHA
Bambamarca en ti dejarán sus huesos
los que en ti nacieron, vivieron y murieron;
en cada
mirada resucitarán las hazañas
de Rondas Campesinas bienhechoras,
desgarradas de matrices ultrajadas.
La Minera Yanacocha, muy
coqueta,
acaricio la tibia palanca de aspiraciones;
promoviendo la inmolación
sangrienta
en el trayecto de San Juan,
Choropampa,
Magdalena y laderas de Soledad Traviesa.
La Minera Yanacocha igual que
tantas otras
es la responsable de enredar
desgracias,
es la responsable de tejer
contaminación,
es la responsable de quemar los
ichus,
es la responsable de ahorcar
quenas.
Yo, terrón de la carne
milenaria del pueblo,
digo: Yanacocha le quitó el
peine de cacho
a nuestras viejitas de cabellos
blancos,
impidiendo la expulsión de
parásitos
que se alimentan de la sangre
del pueblo.
Las
mineras, zumbonas moscas negras,
moscas
verdes gangosas y moscas amarillas,
se
posan en platos de comida, las contaminan
y
frotando sus patas, volando y volando
como
helicópteros, nos mandan la muerte.
VII
MINERÍA ARTESANAL
Nuestro amor ondulante, como olas del destino,
siente que la
explotación minera artesanal
es
pedal que frena el trajín de productos;
los
golondrinos ya no siembran ni compran
el
trigo aventurero y nuestro maíz nativo.
Dicen
las voces que se arrastran como sierpes
que
nuestra quinua es mercurio asesino,
que exige la contratación de
carrozas;
que nuestro trigal es huerto de
espantajos
que no justifica los gastos de
la siembra.
El vendedor que nada vende
vendiendo
está quedándose sin alma y sin
pan;
a pesar de todo ello sigue
ofertando
para sustentar el armazón vertebral,
de la madre que bosteza junto a
su hijo.
La noche azuzada por rostros
deformes
recorre sendas repletas de
búhos;
la flora está reseca, la fauna
cuarteada
y sin embargo seguimos
cultivando
viñedos de esperanzas
compartidas.
Hoy me crucé con los pétalos dañados
de rosales desprendidos de su
ramal
y sus estambres rozaron mis
versos
sugiriéndome que rece y pida a
Dios
su manto para mi barro
pensativo.
VIII
COLORES QUE EMPOBRECEN
Puñales filudos, detrás del ventanal de estrellas,
brillan y brillan proyectando luces de muerte.
¡Qué importa!...Sigo sangrando
mis labios
con mordiscones de protestas y gritos
de muchedumbres que piden trato
justo.
El desastre ecológico ha intoxicado
con resiembra de millones de verdes,
con agua infectada que degüella
la sed;
con papel que se desintegra en las
fosas
con caricias que atan y no
dejan desatar.
Transcurrido décadas de
incertidumbre,
flamean en el cielo gasas grises y fétidas
sobre San Juan, Choropampa y
Magdalena,
los mendigos sentados en bancos
de oro
que se duchan en cascadas de mercurio.
Doradas, plateadas y codiciadas
son las hadas que seducen a
mineros
en las franjas oscuras de
nuestros cerros;
y nosotros, muy distante,
observamos
la deshidratación del dorso
sometido.
Los colores que enriquecen a los
ricos,
son colores que empobrecen a
pobres;
por eso ¡Oh huésped fugaz del
Palacio!
rescata a la “Ñushta” nutrida de
los Andes
queremos el calor de sus
profundidades.
IX
BOSTEZOS
ÁUREOS
Tengo el sufrimiento prisionero
en la memoria,
y siento sacudón en mi corazón trotamundos;
porque sé que los lingotes de
oro tienen alas
y con el ruido estridente de
motores se alejan,
desdibujando la sonrisa esperanzada
del pueblo.
En otros lares disfrutan con
manos enguantadas,
el sudor del minero que sembró
una semilla,
taló un árbol y partió las leñas
de su alma
para atizar el fogón de los
empresarios
a cambio de nada, absolutamente
de nada.
Como una araña ávida que desteje su red
recorremos senderos invadidos por invasores,
pisando las chacras resecas que no
frutecen,
y llegando a casa, muy tristes, recordamos
el arribo de Amstron a la superficie
lunar.
La politiquería es una maraña
deshonesta
con soplones escondidos y relámpagos.
Si desparecieran quedaríamos como antes
bebiendo potos
de chicha y copas de pisco,
triturando ofensas y masticando
coca.
En Yanacocha, Antamina, Volcan Barry, ,…
hay bostezos áureos de toneladas de oro,
controladas por funcionarios
que llevan
corazas de administración
ilusoria
que ofertan granjas con cercos
de cristales.
X
NI MANOS FRANCAS
La
indolencia de los funcionarios mineros
hace
que se muera y resucite con hambre
porque
Dios se olvidó de su ira sacrosanta
sobre la luz opaca de semilleros de nostalgia
y sueño verde eterno de kikuyos insaciables.
El niño, de este viejo, emerge en sueños,
busca báculo para apoyar su
cansancio,
y temeroso perfora cristales del ventanal ,
a sabiendas que estrella alguna sonreirá,
ni manos francas estrecharán con afecto.
Son
tan irrazonables e inconsecuentes,
que
los saludamos con respeto por decencia.
Si
hacemos el bien, mañana está olvidado,
la
franqueza nos hace seres vulnerables,
sin
embargo, seguimos francos y sinceros.
¡Qué
haremos frente a tantos socavones
cogiendo
nidos y ramas colgados de la
aurora
y llena de vulnerabilidad el alma suicida!
¡Qué haremos si nuestro pueblo tiene sus ojos
muertos a las luces claras de la globalización!
Lo que tardamos en construir a través de siglos
y llena de vulnerabilidad el alma suicida!
¡Qué haremos si nuestro pueblo tiene sus ojos
muertos a las luces claras de la globalización!
Lo que tardamos en construir a través de siglos
se
encuentra reseca en la plaza de Cajamarca,
como
una estrella lejana arrugada y apagada,
sin embargo seguimos luchando y
luchando
contra pactos y convenios
vergonzantes,
XI
A
los gérmenes nuestro cuerpo ofrece la vida,
pocos
son risas de alborada y muchos necesarios;
sin
embargo, algunos prefieren por las genitales
y
son las venéreas que atentan contra la salud,
frutos
de aullidos y jadeos de carnes
ensartadas.
En
nuestros extensos Andes mineralizados
la
vida multiforme camina de tumbo en tumbo,
la
enfermedad duerme y emerge en los pocillos
con
el tambor del corazón de agua extraída
o
de los ríos corrompidos desde su placenta.
La
contaminación nos hiere con su lepra
de
agentes físicos, biológicos y químicos;
el
tambor del Ande nos asfixia con su ira
y
no deja dormir el sueño de los algarrobos,
mientras los labios repican sonrisas
fingidas.
No
acorten el ritmo de vida de nuestros árboles,
los
queremos verde, verde como a verde
viento,
con la sombra, en la cintura, soñamos nuestros niños
con
el brillo del llavero hogareño en las manos
y
sabor de hiel y de menta en los labios helados.
XII
NO ERES MÍO, TAMPOCO SOY TUYO.
La tierra muere
como fogón de campo sin leña,
cuando las empresas mineras,
sin convocar,
expulsan sustancias sólidas,
liquidas, gaseosas
o mezcla de ellas, alterando la
salud y bienestar
regalando cuerpos repletos de
locuras y deseos,
Sobre los montes,
quedan algunas brasas
porque después de cada entrega frugal
la contaminación crece como nubes lluviosas;
muestra su virilidad infectada
a la bella natura,
y enlaza su plenitud con el
deleite ansiado.
Dos ramas en el
tronco añejo herido,
y una hoja
marchita y negra en cada rama,
después de suspiros y llantos
se confiesan:
Juntos escuchamos
perforaciones y embarques,
ahora ya no eres
mío, tampoco soy tuyo.
Apresurado, un toro bravo cruza el medio día,
sus cuernos de plata astean los rayos del sol
sus cuernos de plata astean los rayos del sol
y jadeante expira al borde del contrito tiempo,
sus ojos de planeta son acariciados por la hierba
y toda la distancia verde solloza en silencio.
sus ojos de planeta son acariciados por la hierba
y toda la distancia verde solloza en silencio.
XIII
EL DETERIORO
Los
hombres se fugan de sus cuerpos
creyendo
que son inmortales al morir,
porque
su conducta social le conduce
al
mundo etéreo de la comunicación.
con gestos, lanzaderas de sus ojos.
Los
gemidos del lenguaje mudo,
formulan
la estructura de la cultura,
entre
taladros y besos tibios,
que
se adaptan para sobrevivir.
Alternamos
con las melodías del viento,
alternamos
con hebras de oro del sol
alternamos
con lingotes de oro lejano
que
contaminan el lomo de los ríos y lagos.
El avance tecnológico y demográfico,
acarician ojos, nalgas y
lacrimales;
alterando el medio, atentando el
equilibrio,
porque es igual, equilibrio
ecológico y civilización.
Si hay hambre, picamos
cabeza de cebolla,
exprimimos limón, cortamos trozos
de carne,
sal, perejil y servido está el
ceviche
de trucha, Cachema, Bonito o
chocho serrano.
XIV
EQUILIBRIO
Sus pasos son mis
pasos, si se cae caigo,
no hablo por
hablar, créanme cuando digo:
Para lograr el equilibrio hay
que conocer
la historia de renovable y no renovable.
Para resucitar a Lázaro, que es
fundamental,
hay que saber cómo las velas se
consumen
cuando la corrupción emerge con
la adición
y lo nocivo emerge con la
contaminación.
Conozco los secretos que la piel esconde,
si me guía una
mirada, con ella, tengo todo,
la duda emerge con el rechazo disimulado,
el placer emerge cuando se bebe
el brebaje .
Su vida es mi
vida, si me trasmite el mal
pierdo mis
alas y caigo lejos de ella.
La contaminación antes del
canto del gallo,
zanja las actividades
cotidianas del hombre.
Al despabilar el
amor ardiente en la mañana
se asesina el
placer con el despertar del sol,
impidiendo la danza lenta del
aire fresco,
que desabrochó los párpados
empolvados.
Destejiendo digo
que vivo en mi soledad
porque el hombre satisface al hombre
y quizás apague las luces del
ambiente,
quizás corra la cortina para
quedar desnudo.
XV
¡DONDE
ESTAREMOS¡
Faltan palabras y sinceridad, sobre género,
cuando la sangre hierve, recorre y grita;
cuando la sangre hierve, recorre y grita;
el lupanar abriga su claridad
cada noche
y debajo de mi casaca encendido va mi ser;
La sombra permite palpar la sombra
y gritar: !Saca tu sarnoso que contagia!;
pero la voz no cumple con las jornadas
ni las apariencias ni las consecuencias;
La fuente de emisión es ácida y
física
que produce liberación
contaminante
al aire, al agua, al suelo y océanos
y mis candiles son sus ojos de quimera.
Me quedan ensueños de mis pocos años,
la muerte se aproxima, no me mira, yo sí.
y la lluvia y los años han cavado
un foso.
Noches integras caminan a pie juntillas,
ocultas en la fronda avanzan pensativos
hacia el infierno interno, portón del perdón,
donde los poetas se ríen
de mi escritura.
XVI
CONTAMINACIÓN
AMBIENTAL
No sé si llorar por el dolor o
por el gozo.
Siendo límpida se contamina el
agua
con la incorporación de
materias extrañas:
microorganismos, productos
químicos,
residuos industriales y aguas
residuales.
Planchamos los trajes mojados y
remojados
con la palma de nuestras manos inquietas;
mientras, con la lluvia que cae
a tropezones,
hay materias invisibles que deterioran el agua
y la convierten en fuente
inútil y puñal artero.
Repican los bronces para socorrer
a la tierra
de la contaminación del suelo
compasivo
con la incorporación de materias extrañas,
que desnucan animales, plantas e
ideas
y al cansado barro transeúnte
que tastabilla.
Estoy
seguro que los serafines lanzarán,
con quenas dulces en sus bocas de cristal,
mensajes de solución y una voz retumbará
con quenas dulces en sus bocas de cristal,
mensajes de solución y una voz retumbará
sobre el arco
iris curvo, como puma en asecho
y la sombra
pasará, cómo pasa el crudo invierno.
XVII
FETIDEZ
SEXUAL
Me duele sentirme solo y no estar en la fosa,
no sentir la oscuridad tibia del túnel que besa,
mientras contamina el aire con la
fetidez sexual
aderezada con gases tóxicos de horno invisible.
En huerto poblado por cantutas
aromadas,
fue mi niñez, parte del centro escolar
mixto,
donde
estudié bajo la sombra de los
alisos
para después enseñar bajo otros alisos.
Como pasacalle del
tiempo, entre la muerte,
que permite el desarrollo de
las plantas;
mi adolescencia que incineró mi
niñez.
permitió rescatar la salud de los humanos,
Era una hembra con muslos que callaba
los favores que con locura me
prodigaba,
en una casita de
adobes y techo de paja
que ardió con ira escondida de ceniza.
Ardió como el tiempo en cráter de un volcán,
con las mismas llamas y calor de su aliento;
ardió en sí misma, como la soledad arde
en nosotros, sin nieve, sin garúa y sin río.
con las mismas llamas y calor de su aliento;
ardió en sí misma, como la soledad arde
en nosotros, sin nieve, sin garúa y sin río.
XVIII
NUESTRO AMBIENTE
Con una leve caricia de suspiros
de viento
que trata disolver lo grisáceo del tiempo,
nuestro dócil ambiente se
contamina
con desechos sólidos de fogones
hogareños
que sazonan el pan de cada día.
Tratando engordar las
sementeras raquíticas
Utilizamos fertilizantes
industriales
que chamuscan laderas y
destruyen pampas,
con productos químicos volátiles
que recorren suaves en alas de
mariposa.
Nuestro ambiente se desnuda
impúdicamente
con tala de árboles que impiden
descansar,
bajo los ramajes de verde
frondosidad;
con la quema indistinta de
pastizales
y muerte de potrancas llenas de
vitalidad.
Con el monóxido de carbono que riegan
los vehículos en calles, plazas
y carreteras;
con el desagüe fermentado con manjares
y desperdicios de potajes
sensuales
los muertos caminantes mueren
caminando.
Tratando de morder a la nubes juguetonas;
y no las
miremos que el silencio atraviesa;
no agotemos nuestro ánimo de burbujas
con colores soñados en nuestra niñez.
no agotemos nuestro ánimo de burbujas
con colores soñados en nuestra niñez.
XIX
RECUERDOS
QUE DESHIDRATAN
El peón al llegar cansado a su humilde morada,
se derrumba sobre pellejos tendidos en el piso
y su pensamiento se remonta hacia el pasado
recordando las hazañas juveniles con la honda.
se derrumba sobre pellejos tendidos en el piso
y su pensamiento se remonta hacia el pasado
recordando las hazañas juveniles con la honda.
Y la tiesa palanca que arrancó flores y gemidos,
en la tibia hondonada del huerto impetuoso
partió como boa en pos de cristalina cascada
partió como boa en pos de cristalina cascada
donde ahogarse sin escamas del
recuerdo.
Los recuerdos deshidratan las neuronas
y el pobre hombre se queda muy dormido
para soñar un mundo despreciable y ajeno
para soñar un mundo despreciable y ajeno
que se torna violento, perverso e injusto.
Al recordar el ultraje de los dueños de minas,
una convulsión desarticula su débil imagen
y sus lágrimas inundan su frazada oscura
en el que su mujer violada fue por un capataz.
Sentado divisa flores sin colores y
aromas,
pájaros que no tienen paja ni para su
nido;
por eso se levanta y de rodillas pide
al Sol.
XX
EL CONTAMINANTE
Pesada, como amplia toalla remojada,
el pubis se desliza por velludos
muslos;
así la contaminación suave se deriva
de la dispersión de materiales
radiactivos,
empleado en instalaciones
médicas.
La contaminación imperceptible procede
de los centrales energéticos
activos,
blindados con metal aleado con
uranio,
submarinos, satélites artificiales
desprendidos
como el Chernóbil la noche final del mundo.
Los gemidos entrecortados del viento
trasladan al paraíso de la
ensoñación;
así, la corrupción es la
emisión de fluidos
e incremento de la temperatura
ambiental
que reduce la solución del
oxígeno en el agua.
Con música delicada ceñimos el cuerpo soñado
y extraemos ritmos de sus
labios de topacio;
y si hay contaminación acústica
es el ruido
provocado por las actividades
industriales
que excita malestar, Insomnio y
sordera.
La contaminación lumínica es el
resplandor,
producto de la reflexión y la
difusión del albor
en los corpúsculos del aire por
el uso constante
de lámparas, faroles, candiles,
focos y fluorescentes
en paseos de antorchas,
socavones y mansiones.
Ahí está la luz, alumbrando
desgastando y brillando;
no puede tocarse, parece mármol
de Carrara fino,
es la contaminación sensorial visual imperceptible,
engendrado por millar de instalaciones industriales,
en edificios y parques que dañan
la estética del medio.
El hombre con dolor en los
tuétanos cruza huertos
y siembra sus semillas para
regarlas con llanto
y no puede evadir tropiezos en
raíces carcomidas
del mismo hombre que por mudez
no grita ni aúlla,
del mismo hombre que por ignorancia
no protesta..
Por eso nuestros hijos buscan
paz en otros lares
donde , piensan , que nadie
tocará sus cejas,
donde obtendrán dinero y
poder a raudales,
donde no procrearán dolores ni
sufrimientos,
donde el pan blanco sea
devorado por diabéticos.
Moriremos buscando un mundo con
follajes
una meseta, con pajonales,
repleta de ovejas,
ovejas con vellones
transformables en abrigos.
Moriremos buscando una ciudad
loca de amor
donde las miradas vuelen desde
los balcones.
XXI
PREVENCIÓN
El volcán del corazón
está a punto de petardo,
al saber de la
contaminación de valles y cumbres,
al saber de la
destrucción de lagunas y bosques,
al saber de la reducción de las playas y mares
al saber de la
evaporación de las nieves y lagos.
Si queremos vivir más
tiempo en espacio amplio
no profanemos con
fertilizantes y pesticidas,
no arrojemos armaduras
en lugares inapropiados;
hay que regular el servicio de purgatorio urbano
empollando conciencia
ciudadana y respeto.
Hay que regular las vías de desagüe,
evitando que residuos
domésticos
lleguen a la profundidad de ríos cansados
y que los mares furiosos sacudan su pelambre
al estrellarse en los
desnudos acantilados.
Hay que liberar
los sueños presos en el tiempo,
limitando la línea de
la contaminación ambiental;
hay que evitar el
resbalón de negros fósiles,
controlando relaves llenos de fuerza destructiva
que llaman a la muerte
sin extremaunción.
Convoquemos a todos
los follajes, para destruir:
relaves que no pagan cargadores ni plañideras,
relaves que sorben el
pezón de nuestros cerebros;
relaves que
convierten los hornos de fundición
en hogares macabros
de muerte lenta y segura.
XXII
EFECTOS
Tengo desplegada el blasón de la
esperanza,
como carretera con demasiada gradiente
que exige al final de su loco recorrido
buen destino sobre pellejos
mullidos.
Sobre ellos duerme la delirante
pasión,
mientras la sierpe de la
profanación avanza
jugueteando su lengua viperina
por el hoyuelo
ambiciosa de saciar la sed de
sed de su curiosidad.
La contaminación con plumíferas
partículas ondulantes
se torna huayco en populosas urbanizaciones
que con sustancial transparencia
vítrea,
afecta nuestra salud
cardiovascular.
Y
después que los faroles se apaguen
nuestras miradas
buscarán el azul del cielo
y al no
encontrarla lanzaremos flechas de oro
en busca de bull que nos
contacten con las estrellas.
El humo del tabaco y de los
autos el escape ruidoso
crean partículas que exigen el
cumplimiento
de reglas estrictas de tener
aire limpio
para el goce de primaveral
salud.
Aunque la capa preciada de ozono
se desvanezca cuando dejamos de llover,
trotemos descalzos nuestros pensamientos
hasta llegar a la meta trazada por el crudo Otoño.
XXIII
SE AGOTA LA VIDA
Al trazar con
pinceles delirantes,
arrebatados al
crepúsculo arrebolado,
he retratado
en el lienzo de la vida,
el
debilitamiento de la capa de ozono,
que protege de
la radiación ultravioleta del Sol.
Casi nada
queda de nuestra civilización;
los empresarios
y gobernantes de turno
se han
olvidado que son parte nuestro hábitat,
se han olvidado que son globos aerostáticos
que se elevan
con el hidrógeno contaminante.
Nos hundimos, nos
caemos como aerolitos,
en la catarata incandescente del olvido,
en el despeñadero de la mentira insana,
en la catarata incandescente del olvido,
en el despeñadero de la mentira insana,
apenas podemos retornar,
hecho trizas,
de nuestra
huérfana profundidad existencial
Como el tejado
de nuestras viviendas
que se
deteriora con la trilla del tiempo,
se estropea,
cada vez más, nuestro planeta
atentando
contra la esbeltez de los eucaliptos,
y la sinfonía alentadora
de las avecillas.
El mundo se
arrodilla y besa a las estrellas;
el agua lleno
de metales se ondula y llora,
y cogiendo
martillo de piedras se martilla.
Siento a la
muerte avanzar cojeando,
en la penumbra
milenaria apolillada.
XXIV
FRENEMOS LA MODIFICACIÓN
Frenemos el mimetismo del clima,
disminuyendo
la seducción
del
gas invernadero
y
presionando a los empresarios
la
reducción de emisiones
de
gases tóxicos.
El
aire, el agua contaminadas
que
respiramos y bebemos;
los
alimentos enlatados
y
la incineración de pajas
altera
nuestra salud mental
y
nos convierte en moscas.
Los
compuestos tóxicos,
que
matan con el sol y la luna,
son
los metales pesados
y
las dioxinas malolientes,
producto
de relaves mineros
instalados
a mansalva.
Las sumas cancerígenas,
alteran con su estructura
invisible
nuestro sistema inmunitario,
hormonal, reproductor y
nervioso;
urge la catarata de inversión económica
para irrigar los camellones de
solución.
XXV
FAROLAS
DEL RECUERDO
En la hora contrita de la
meditación,
en lejanas edades de los dinosaurios,
rondando en farolas del amigo recuerdo,
el hombre rueda arrastrando su
cansancio.
Mañana, nuestro planeta será duro
soporte
de seres mágicos, diferentes al
nuestro;
y deambularán sombras
esqueléticas
entre edificios calcinados por
el sol.
Hoy los ritos militares y comerciales
de la faz estropeada de energía
nuclear
apertura la fosa letal y honda de la muerte
con lampas de radiación y cenizas
que genera.
Al final, los astronautas saben
que direccionarán
sus pasos sin peso ni ritmo sobre
el tablero,
tablero cuadriculado
por colores neutros,
sin caballos, rey ni reina, alfil ni peones.
El Divino que mueve el universo
creó al hombre que maltrató su grandeza.
¿Acaso Dios es responsable del ajedrecista
que vive y se alimenta de regocijos sin control?
XXVI
ES UNA RATONERA
Tomo prestado,
como si fuera una
receta médica,
los cambios climáticos del
tiempo
y la rotación
atmosférica inducida
por la actividad
delirante humana.
La temperatura media
del planeta
de seis grados fue en
el Siglo Veinte,
un siglo después avanzó
a ocho grados
y la fiebre del mar elevó
a noventa metros,
impidiendo el salto
normal de las pulgas.
!Señor Ministro de Salud! ...¿Qué hacer?
Los ardores crean condiciones favorables
para los insectos paul
satrerianos
transmisores de Malaria
o el Dengue;
a ritmo de mambo o
merengue.
La atmósfera es una ratonera térmica
que atrapa con la
concentración de gases,
por la quema de
combustibles fósiles
que aumentan la
fantasía de la destrucción
y disminuyen los deseos
de menstruar.
XXVII
COSQUILLA
Y MATA.
Hay cambio en el régimen de
lluvias,
en la superficie truculenta de
las nubes,
en el pelambre multicolor del
Arco Iris,
en los cimientos de los
edificios árticos.
La mesa llorona repleta de
hambre
es acompañada por solitarias
patatas,
que reclaman un mordisco
asceta,
del picaflor huérfano que
aletea.
A la hora del ángelus
desarticulado,
por la incidencia de enfermedades
transmitidas por las espumas del
agua
el cólera cosquilla, desespera y mata.
En
el recinto, frente al silencioso espejo,
donde sufren ausencias de furtiva alba,
donde sufren ausencias de furtiva alba,
las
mariposas aleteando besan las retinas
y, cual suspiros ahogados, lejos se van.
y, cual suspiros ahogados, lejos se van.
Cuando la fría noche sacude su
pelambre
con la luz que vuelan los pensamientos,
desde
el pico norte del Huascarán
las
penas cuarteadas se derrumban.
XXVIII
SECUELAS
Mientras, la lluvia taladra el piso
y los rosales mecen sus aromas,
descifro en el papiro del firmamento
la huida del tiempo arrastrando otoños.
La radiactividad en las existencias
es dañina para la integridad física;
según la dosis que proporciona
por la intensidad de su fluidez.
Cuando el organismo
recibe, de golpe, el ¡chasss!
se convocan a un cabildo abierto
para justificar el redoble de campanas.
Los huaycos fraccionados por el tiempo
sellan con huellas profundas de muerte
como el oculto cáncer, la leucemia,
y procesos degenerativos.
En el tópico azulino del tiempo,
los agonizantes que han hecho colas,
son apuñalados con tuerta indiferencia
y las cicatrices son irreversibles en el futuro.
XXIX
OJOS
DE MAIZAL
El
pelambre de nieve de los Andes
ha
sido esquilado por la contaminación
y
la palidez de las rocas ha ennegrecido
por
la fuga de los glaciares y granizos.
Aumenta la temperatura del océano
y se dilata para inundar continentes;
la sinfonía de la catástrofe
susurra
en los tímpanos provocando
martillazos.
Nuestras ambiciones tiritan
alocadas.
taladrando vaginas que no
palpitan;
sólo puntitos de luz dorada,
pulsan su palpitar a cada
empuje del taladro.
Amanece y el astro rey trotamundos
observa,
con ojos de maizal de cabellera
enredada,
los paisajes nebulosos de la
Vía Láctea
y suspira en el pecho amatorio
del infinito.
Zumbamos como
abejas alrededor de la tierra
y nos torcemos en
los espirales de silencio;
somos los
trotamundos sin mochilas ni fiambres
y sin puntos de
apoyo para nuestras palancas.,
y el que todo lo tuvo.
XXX
ASESINATO DEL OZONO
El hombre que dispara la flecha del suspiro,
con el arco de la preocupación permanente,
grita jubiloso de cazar el cervatillo llamado:
¡dióxido de carbono que incinera el planeta!
Intenta flechar suspiros que destruyen el ozono,
los dañinos rayos solares y los ultravioletas B,
que irrigan la extensa superficie terrestre,
convirtiéndola en campo de concentración.
La dosis de UV-B , saliva de la muerte,
amenaza y destruye la salud y bienestar
de las espigas de nuestras cosechas
y la población salvaje de nuestros mares.
Desde los oráculos de calladas citas,
desde nuestros primeros vagidos
que nos permitieron succionar pezones,
extraños seres somos, con cáncer en la piel.
Desde los primeros besos adolescentes
que parecían anunciar felicidad eterna,
la exposición a la radiación UV-B
demuele nuestro sistema inmunológico.
¿Qué esperamos hermanos sin hermanos?
¡Destruyamos las fábricas de los compuestos
destructores implacables del gas azul!
¿Será posible intentar algo que nos beneficie?
XXXI
CORRUPCIÓN
Las galerías mineras favorecen
las infiltraciones grotescas
de órganos erectos de sal
potasa
que eyaculan gases tóxicos.
Disueltos en las corrientes de
ríos profundos;
favorecen los ardores sensuales
de los pueblos
que beben y degustan emolientes
entibiados
con cadmio, arsénico, plomo y
compuestos.
El acopio deficiente de productos químicos;
el arrojo de bazofias en el mar
de los buques...
los gases de los escapes y
aceites quemados
facilitan la corrupción y defunción
ambiental.
Es tiempo que
hablemos un solo idioma,
sin mover los
labios ni los brazos a prisa:
¡Juntémonos
alrededor de nuestra inquietud
como los
segadores alrededor de la era!
Los que preparan y venden productos químicos;
para provocar guerras
de gas, guerras de fuego,
bueno fuera que
nos entregaran trajes protectores
para caminar fumando
pipas doradas de la paz.
XXXII
PROCESO URBANÍSTICO
El proceso urbanístico demuele áreas verdes
con siembra de ladrillos, fierro y cemento,
expulsión de flores odoríferas y picaflores
y crucifixión de risas y sonrisas.
Cerca al escritorio de caoba
el viejo maestro descansa su columna
en el tenue respaldar de los días que pasan
llenando vacíos con recuerdos, pesares y suspiros.
Se suma la migración del campo a la ciudad,
provocando insuficiencia de agua y luz
procreando el bajo nivel de vida
que acrecienta su miseria.
Los arenales se reducen como la fe;
los basurales se abultan como gangrena,
la suciedad asfixia y las voces no acompasan
y la bolsas, preservativos y marihuana desfilan.
Los proyectos municipales tratan cambiar
con el borrón de millar de millar de huellas,
con el humo que asfixian las estrellas
con el humo que asfixian las estrellas
con vehículos que revientan calles.
Las tapadas han dado paso a las destapadas.
La mujer ruiseñor, reflejo de luna blanca,
pulpa de pompa de jabón con amplia anca
se fue para no volver más, cargando sus pisadas.
XXXIII
DESEO TANTO
Deseo
tanto percibir
la sinfonía
de los mares,
acariciar
el plumaje de canoras
y sentir
el susurro de las nubes;
pero,
mis pobres tímpanos
están mudos
y tan mudos
por la
contaminación sónica,
y agudeza
de las maquinarias.
Los
efectos dañinos disminuyen
el
rendimiento laboral eficaz,
aumentando
la ansiedad
y la
sordera incontrolable.
Deseo
tanto conseguir
el suspiro poblado de
ternura joven,
tibio como harina y agua horneada
que pueble mi ansiedad hambrienta.
Y la oración iniciada
se torne ruidoso
pleamar en la playa
y las frías estrellas pájaros migrantes
y las frías estrellas pájaros migrantes
en los bosques azules
del cielo andino.
Hoy que torea la
pasión en mi cuerpo,
ebrio de aplausos de
mi propia barra,
como pétalos amarillos de amancay
deseo perfumar el ambiente mío.XXXIV
RESIDUOS
Los desechos que cobran vida
y los radiactivos que amenazan
con ponzoñas de lengua viperina,
los muslos del hombre rico o pobre,
son derivados de la energía atómica.
Incorporemos a ciclos biológicos
el trajín de la contaminación,
orientando a pozos preparados
con cajas de paredes de plomo,
en el corazón de la bella Egea.
¿Qué esperan el gobierno central,
los gobiernos regionales y locales,
dispersos en el palenque del toril
para evitar la destrucción completa
y muerte lenta de nuestro planeta?
Más efectivo resulta el reciclaje
que permite recuperar el vidrio,
el papel,
el cartón,
la chatarra
y los envases de metal, latas
y bolsas con el alba sangrante.
Desconoce la bondad de la puna freía
donde los bueyes y las puyas dialogan;
desconoce recuerdos mudos que hablan
desconoce recuerdos mudos que hablan
con los caballos y hormigas de la casa
mientras morimos junto a la fuente floja.
XXXV
HAY QUE DIBUJAR UNA SONRISA
Voy a transformar lo que ha sobrado
lo que todos desechan cada día
para que el verde tisú brille
para que nosotros seamos felices.
será el mundo que cambiará
previo cambio humano,
será el reciclaje que cambiará
previo compromiso humano.
La verde fauna está ocre y muy ocre,
el chillar de los grillos triste y muy triste
los mares, lagos, y ríos están turbios
y la vida campestre está moribunda.
Hay que dibujar un mundo sonriente,
sin basura como parte del
paisaje,
con la ilusión de un mundo mejor
que mantenga viva la esperanza.
Rescatemos los
huesos
y la sangre.
del reciclaje que pueden
producir,
alimentos para nuestros
animales
y abonos para nuestras chacras.
XXXVI
EL EQUILIBRIO
Hay que equilibrar el bien y el mal,
que nuestra báscula señale lo bueno;
vivamos fortalecidos
donde nacimos
seguros de que el piropo ambiental
resulta
de la interacción de los factores
que deambulan por los bosques.
La ciencia de la comunicación
determine
el equilibrio
ecológico frágil como escarcha,
tan útil para la existencia de suave vuelo
de fabricantes de raspadilla reconfortante
y de vegetales de frondoso bosque
con suspiros de flores, frutos y madera.
Los efectos de la contaminación
maltratan los recursos renovables:
el agua que reverdece ilusiones,
el suelo que fusiona corazones,
el aire que hincha pulmones,
y la flora que diluye padecimientos.
Al final del verano habrá un nuevo despertar
con el “Tayta Inti”* ascendiendo el horizonte
y la “Mama quilla”** desgranando el maizal;
los picaflores aletearán aromas
y beberán ambrosías de cantutas
hinchando pectorales con alegría infinita.
con el “Tayta Inti”* ascendiendo el horizonte
y la “Mama quilla”** desgranando el maizal;
los picaflores aletearán aromas
y beberán ambrosías de cantutas
hinchando pectorales con alegría infinita.
----------------
“Tayta Inti” * : Padre Sol
“Mama quilla”** : Madre Luna.
XXXVII
EL
DESARROLLO
La fauna que expira sobre sus
huellas
cubriendo vacíos y retirando
costras
cubiertas por pelambres que
infectan,
crucifican y desclavan las ilusiones.
Increible! El desarrollo tecno - industrial
ha rebalsado el cantarillo de la naturaleza
y para restablecer el
equilibrio rastrillado
urge decapitar a la basura que
se prostituye.
Urge movilizar
sindicatos que cobran cupos,
apoyar a los
huesos para movilizar garrotes,
golpear al tambor
de piel humana con el fémur
y azuzar la concentración
poblacional.
Así con lengua y saliva, como
si fuera hostia,
en la hora de la comunión de los cuerpos,
exprimamos el sudor de los
poros taponados
sobre blando y resistente lecho
de paja;
y después del primer suspiro de
los deseos
hacer la ensalada con cebolla y
lechuga,
pepinillo, repollo, limón, sal
y rabanito
que es trabajo saludable esperado.
XXXVIII
PROBLEMA DE SALUD
Mientras trina en las retamas
un pájaro huérfano de su trino
o croa la rana al borde del marjal,
los alimentos y materias orgánicos
fermentan los toneles de la salud.
En la era de espigas que no existe,
la rayada mañana me avienta la voz,
la voz de mi padre que falleció y vive;
mientras bichos de glotona basura,
transmiten la encefalitis palúdica.
La flecha de un vuelo se desvanece,
cual sinfonía, en el molino de nubes
y los alimentos y materias orgánicas,
sin ser ávidos comunicadores sociales,
convocan a ratas que pelan la peste.
Midamos la dura sombra del invierno
y también el agua que baja del cielo
en que el huayco vio su origen
y frotemos nuestra salud que cojea
para divisar el horizonte del tiempo.
y también el agua que baja del cielo
en que el huayco vio su origen
y frotemos nuestra salud que cojea
para divisar el horizonte del tiempo.
XXXIX
CONTAMINACION
La tibia entraña de las doncellas
ha sido incesantemente requerida,
mucho más antes que las de Cleopatra,
Elena de Troya, Julieta e “Ima Sumaq”.
que ahora se condensan en los labios
Marco Antonio, Paris, Romeo y Ollantay,
mientras cumplimos con los ritos del amor
en el silencio que
fatigues el ánimo.
Desde el génesis de la agricultura,
por casualidad genial de la mujer,
se teje al verano
guirnaldas de frutas,
y nuevas generaciones se aprisionan
en ciego tumulto de míseras ciudades
donde desdeñan el arado por las joyas
y
generan, a veces, bienes y servicios
queriendo garantizar el bienestar social.
Las actividades son más complejas
y se tejen con la destreza de Penélope
para lograr el chal de tecnologías
que generan la productividad competitiva
en un mercado cada vez más exigente,
chorro permanente de contaminación
y muerte estresante pre natal.
XL
INCERTIDUMBRE
La mina exuberante es como Eva
que tiene sagrada bifurcación;
extendida sobre la Rosa Náutica
y cubierta con llanto de náufragos.
Aplaca toda sensualidad
quemante
ahogando con sus profundidades
los barrenos que golpean y
golpean.
con una fuerza asombrosa de luto.
Para balbucear sobre la Minería
se requiere de un análisis
integral;
no basta flamear banderas de
lucha
y reducirse al aspecto ambiental.
El romance del agua con metales
procrea un tratamiento de costo
abismal
que amamanta con recibos
mensuales,
a sabiendas que ese liquido no alimenta.
Ese elemento flexible es lamento
sin origen
del agro, la pecuaria y esperado
ecoturismo;
y los mineros son trotadores de
corredores,
con luz de lámparas y fuego de
silencio.
XLI
NADIE
PUEDE
Nadie que no sea don Quijote de
la Mancha
puede pretender un desarrollo sustentable
con agua contaminada con arsénico
y plomo
que horadan laderas y esófagos
milenarios.
Yanacocha, Antamina, Barry,
Pigmeos
y centenar de empresas mineras
artesanales
no cumplen con los estándares
ambientales
y los infantes sin escuela se
tornan pilluelos
¡Increíble pero cierto¡ En nuestra patria
las huelgas de los trabajadores
mineros
son desvirtuadas por la
colectividad hipotecada
que no sólo maltrata a campesinos indefensos;
sino también a los que con el
sudor de su frente,
y raquíticos jornales, generan
riqueza empresarial,
que no les permite, siquiera,
un orgasmo pasajero
al pie de un árbol sin sombra
ni trinos alentadores.
Las madres y sus hijos,
cansados de tanta espera
se arrodillan ante la cruz de
la curva del camino
y caen extenuados como aguas
rotas de lluvia
con las garras asidas a una
rama que se fractura.
XLII
SUELDO QUE NO ABLANDA
En las ocho regiones del Perú,
mientras los auquis duermen,
extraen del ovario terráqueo
granos de oro, plata y plomo.
Los desnutridos atrapados,
sobre rieles de minerales,
con frías tenazas logran oro
que tiene un costo abismal.
En nuestro mundo flojo y flojo,
parpadea la gestión empresarial
y el clamor de los obreros golpea
reclamando salarios más justos
En Yanacocha, Antamina y Barry
trabajan como mulas de carga,
y los jornales son mantas del alma
que retiradas resfrían y matan.
La era de los desventurados
se aproxima con goteras del alba,
chorreando hambre, miseria y llanto
acompasado por ritmos de reelección.
XLIII
SAQUEO
Cuando
la Sociedad Nacional de Minería,
anunció
que la fuga del oro y de la plata
anidaría
nueve mil millones de dólares,
dijimos:
¡Cuánta plata¡ ...¡Cuántas obras!
Apenas
quedó el uno por ciento de canon.
En el extenso panorama de la depredación,.
hay un cristal fracturado que refleja
a
Cerro Verde, Yanacocha, Antamina...
donde
destejen lo tejido como Penélope
y
dejan de pagar mil millones de verdes al año.
El cuerpo de mujer pierde su naturaleza
al
ser tomado a fuerza y fuera de su alcoba
y
sus pezones dorados y tibios succionados
por
fauces salvajes que dentellan animalidad
y
procrean con la monta irracional sin monta.
Al principio
parecían turistas científicos,
se paseaban por el
territorio como en su casa,
captando con lentes fotográficos potentes,
captando con lentes fotográficos potentes,
la superficie que
revelaba hondura codiciada.
pero nada hicimos para impedir la intensión.
pero nada hicimos para impedir la intensión.
Hoy que nuestras lomas de pastoreo
tiemblan
con un temblor de polvo amarillento y
viscoso
amo la guerra en ellos, su voz de espadas,
y conozco de heridas, muertes y derrotas,
y de globos aerostáticos a punto de
arder.
XLIV
ROBO DE IMPUESTOS.
Cajamarca, con su cuarto del rescate,
considerado fue el cuarto departamento
con su manto de pobreza raída por el frio;
luego pasó a ser el monarca emplazado
en el segundo de la veintena miserable
que repta por las pendientes de la pobreza.
El indicador bajo el techo transparente
de Huari, Huarás, Arequipa y Moquegua,
con pestañar de estrellas, es más alto,
que ha inducido la riada del costo de vida,
la prostitución y la delincuencia urbana
que crece, arrollador, una hora por segundo.
Las ninfas del tiempo, consultadas al azar,
muestran, en el cristal, la huida primaveral
en hipocampos que nunca más volverán.
Y las horas aletean llevándose los sueños,
Y las esperanzas degüellan a la patria libre,
Y los sueños opacan el brillo del metal precioso.
En una década terminará todo, todo y todo.
Las empresas mineras se irán, se irán, se irán
y cuando se vayan hacia una larga ausencia
¿Qué hacer con el agua, con el suelo, con el aire,
y con el mar y las geomembranas sepultadas
con metales pesados en todas partes?
XLV
UN
CRECIMIENTO IRREFLEXIVO
¿Y las comunidades con trabajadores
y familias
y las empresas prestadoras de servicios?
¿Tenemos una agenda alternativa
a la minería, ecoturismo y
agroindustria?
Sólo miedo y mutis de las autoridades,
que se pasan segundos estirando
la mano,
esperando las propinas de
Yanacocha,
de Atamina, de Barry
Misquichillca,de ...
La minería alarga sus
tentáculos
para expandir operaciones
abusivas
porque los gobiernos regionales carecen
de un Plan de Ordenamiento Territorial.
Así, viendo
atardeceres que entristecen,
subimos las montañas abismales de nieve,
vamos a más lugares adonde nunca fuimos,
gustando raspadillas y añorando las cebadas.
subimos las montañas abismales de nieve,
vamos a más lugares adonde nunca fuimos,
gustando raspadillas y añorando las cebadas.
Minería en San Cirilo es lirio
negro
que esparce su polen de contaminación
en las cuencas del fatigado “Llaucano”
y Agroexportadora del
Jequetepeque.
El crecimiento irreflexivo de
la minería,
anida serpientes con ponzoña mortal
que reptan por las pendientes y planicies
listas para sorprender incautos.
XLVI
LA MINA ES UN VOLCÁN
Al final, la mina es un volcán
que erupciona, salpica reveses,
desnuda cerros, zanjas y lomas,
desvía causes e inunda playas
y maquilla a nuestras doncellas.
La gigantesca ruleta minera
gira en torno a la contaminación,
explota a millar de trabajadores,
corrompe al Estado con regalías,
mata a la muerte antes de tiempo.
Urgen los debates concienzudos
de propuestas y alternativas;
somos cómplices de la explotación
que permite mirar de costado al futuro
mientras se ahoga la flor de retama.
La tremenda irresponsabilidad
de quienes actuando no actúan
es la creciente del manso río
que arrasa las esperanzas,
e impide la resurrección de ilusiones.
Nuestras vidas son las cascadas,
nuestra muerte son los desaciertos
de los que mandan y gobiernan.
Nuestra resurrección es el afilar
Que pinchará las ofertas mineras.
XLVIII
PASO ATRÁS
Cuando sueño con la mina Yanacocha,
me distorsiono con melodías negras
estirado sobre los pellejos albos
que se contorsionan debajo de mi cuerpo.
Yanacocha es gigantesca pileta de oro
que micciona los ríos Porcón y Grande,
que envenenan gargantas campesinas
en la zona de operaciones mineras.
Sobre la minería en el Cerro Quillish
el poder judicial en sus instancias dijo:
“El bien privado no puede aplicarse
al bien público de cantutas y búhos”.
Nos duele los resentimientos infieles,
de esperanzas surtidas en el pasado
de explotación dolorosamente dulce
y minas de transparente veta sepulcral.
de esperanzas surtidas en el pasado
de explotación dolorosamente dulce
y minas de transparente veta sepulcral.
El esfuerzo es una flecha de trigo,
y mi pecho es un arco que dispara
un latido lento de manantial limpio
que quite la sed y propague la paz.
XLIX
EL SANTUARIO DE LA INTANGIBILIDAD
Al
ritmo estridente de cajas y flautas,
la
Universidad Nacional de Cajamarca
declaró
al Cerro dorado de Quilish:
“
El Santuario de la Intangibilidad”
y
millar de nativos se inclinaron
ante las garras del cóndor andrajoso.
Yanacocha enredó
con sus telarañas
a centenar de líderes
comunales
y
millar de campesinos errantes,
azuzados
por el deseo de vida
que
triza el sistema digestivo,
cerca
al funeral del “apu Quillish”.
La
minera drogó al burgomaestre
con
dosis de convenios de inversión,
lavado
de estudios de maestría
en la Universidad Complotense;
y
neutralizó al presidente regional
con
el espejo de computadoras.
Queda
en pie la cojera de construcciones
y
caudal para embarazar proyectos
y
para concebir centros de salud
y coliseos para complacer la soberbia
y
degollar el hambre con diversión fugaz
de
trabajadores sin licencia para construir.
XLVII
SALDRÁN
Y RETORNARÁN
Mientras tanto saldrán de la mina
recordando sus miserias pretéritas,
olvidarán por unos momentos
recordando sus miserias pretéritas,
olvidarán por unos momentos
la convivencia con las explosiones,
extrayendo el mineral valioso
y destruyendo su riqueza cerebral.
Retornarán al
primer canto del gallo
a devorar los
polvos corrosivos!
a masticar los óxidos pegajosos
con las cuñas de su dentadura
a masticar los óxidos pegajosos
con las cuñas de su dentadura
en el yunque de
su lengua
sedienta y muda
para protestar.
Acerado por el dolor permanente
y con botas
de jebe agujereado
y músculos de raíz deshidratada,
subiendo y bajando las sombras;
mirando hacia abajo subirán
y mirando hacia arriba bajarán.
Mientras las nubes voluptuosas
recorrerán el añil cielo divisando;
mientras las fuentes contaminadas
horadarán intestinos sin distinción;
y mientras existan besos de picaflor
se bailarán huaynos remendados.
LI
MINERÍA Y MEDIO
AMBIENTE
Con la melodía del
pensamiento,
cada vez más
convincente,
les muestro la
radiografía
que justifica el sentir
del pueblo.
Toda actividad humana,
gota a gota,
causa serios impactos
ambientales;
pero, si las gotas sonoras se suman
las tragedias son truenos
y relámpagos.
La actividad industrial
no es ajena
y frenar la
contaminación ambiental
con las bridas del
amansador
significa mejorar la calidad de vida.
En el Perú, las normas
del ambiente
son goterones que se
espesan al caer;
pero, en la minería, las
pepitas de oro
exigen estudios de
impacto ambiental.
La comprensión es la
protección
del vergel, poblado por
rocíos y trinos,
que aroman con la
frescura suave
seguros de la victoria
del pueblo.
LII
INVOCACIÓN
Franco
tiradores de la noche,
con aurículas amputadas,
con aurículas amputadas,
antes de matar a inmortales
escuchen las voces ahorcadas.
Quiten los vehículos blindados
que azuzan el espíritu de los canes,
destrozan la tibia de los fantasmas
y flamean los ponchos antibalas
Coman puchero
con carne de mentiras,
porque las sombras trotamundos,
se convertirán en pumas agresores
y enjuagarán con sangre sus dientes.
Ruegos ya no, al pie de las cruces,
por la muerte de flores campesinas;
no más
arreboles ensangrentados
sobre
escuelas y valles profundos.
Buey y hombre jadeen sudorosos,
no más yugos y arados victimados;
que los pueblos no sean exprimidos
como limón
jugoso de los huertos.
Ríen los parteros de la
desgracia,
masticando la tristeza del pueblo
como si el llanto fuera maíz tostado
masticando la tristeza del pueblo
como si el llanto fuera maíz tostado
y la tierra de los pobres cementerio.
